Celebrando en Vigo

El Colegio preparó con tiempo y dedicación muchas actividades y festejos que fue ofreciendo a la Comunidad desde primera hora de la mañana. Nos invitaron a participar en el patio en una oración y nos sorprendieron con una escenificación de la Fundación. Una palabra, -GRAZAS- realizada en el patio con flores hechas por los más pequeños a modo de alfombra y un recuerdo agradecido y personalizado a cada una de la Comunidad.  Además nos entregan un álbum  de fotos de cada curso con mensajes individuales y expresivos, dibujos, reconociendo los valores que viven en el Colegio y agradeciendo el testimonio y compromiso de todas las personas que lo han hecho posible. También nos hacen entrega de un cuadro de Santa Bonifacia realizado con las fotos recopiladas de todos estos 90 años de historia. Una vivencia llena de expresiones de cariño y de emoción contenida.

A media mañana la Comunidad invita a todo el personal a tomar un café y unos dulces caseros para seguir celebrando.

A mediodía, ya con la mesa puesta, nos llaman a la Comunidad al salón del Colegio para hacer una foto antes de marchar… Al abrir la puerta nos sorprenden de nuevo con la invitación a participar en una comida ofrecida y compartida entre todos los colaboradores habituales: Comunidad educativa, personal de servicios y limpieza, Club deportivo San José y ANPA, cantando todos “feliz, feliz en tu día”… de nuevo obsequios de flores y objetos simbólicos de agradecimiento. Finalmente, toca agradecer y soplar las velas de las tartas de cumpleaños de 150 y 90 con el consiguiente cumpleaños feliz, cantando palmeando y bailando entre algunas lágrimas de emoción…Después de una larga sobremesa nos encontramos de nuevo en la Celebración de la tarde.

La Comunidad religiosa preparamos con dedicación y esmero la Eucaristía de acción de gracias, – a las 8 de la tarde en nuestra parroquia de Nuestra Señora de las Nieves- presidida por nuestro Obispo D. Luis Quinteiro,  acompañado por el Párroco y otros sacerdotes amigos. Participaron además, profesores, alumnos actuales y antiguos y personas cercanas de nuestra vida parroquial. Mención especial para la colaboración de nuestra “Coral de Téis”, que no sólo cantó su propio repertorio, sino que ensayó para la ocasión nuestros cantos. Al comienzo, “Una mujer abriendo caminos” y al final el Himno de Nuestra Fundadora, poniendo así el broche final a nuestra celebración.

         Una fiesta, más para vivir que para contar. Una experiencia entrañable, cercana; expresión de un vínculo común que nos une a todos los colaboradores de nuestra obra educativa y que va mas allá de una relación laboral o personal , que se siente con la savia que da vida a una experiencia de familia en la que se reconoce el espíritu que nos une.